Diversos estudios han demostrado que el compromiso coronario microvascular se vincula a un peor pronóstico en pacientes cursando un síndrome coronario agudo. En este contexto, se han desarrollado y validado múltiples estrategias y tecnologías con el objetivo de pesquisar el estado de la microvasculatura coronaria a fin de implementar medidas terapéuticas precoces para la reducción del riesgo.
El índice de resistencia microcirculatoria (IMR) es un método invasivo y con alta reproducibilidad para el análisis cuantitativo de la función microvascular, independientemente del estado de los vasos epicárdicos y a través de una guía de temperatura y presión. Así, el IMR ha demostrado ser un predictor independiente de riesgo en el escenario clínico de un infarto agudo de miocardio luego de la revascularización mediante angioplastia transluminal coronaria (ATC), como también una herramienta recomendada para el diagnóstico y seguimiento de los síndromes coronarios crónicos y la isquemia sin enfermedad coronaria epicárdica obstructiva. Sin embargo, su aplicabilidad clínica permanece reducida principalmente secundario a su complejidad y costos.
El IMR derivado de la angiografía (IMRa) es una novedosa tecnología sin requerimiento de guías de presión que logra mediante un sistema informático la determinación del IMR. En este contexto, el IMRa ha demostrado una buena correlación con el IMR convencional y un rol como predictor de riesgo en pacientes con infarto agudo de miocardio (IAM) con elevación del segmento ST (IAMCEST). Sin embargo, hasta la fecha el valor pronóstico del IMRa en pacientes portadores de un IAM sin elevación del segmento ST (IAMSEST) no se encuentra explorado.
El objetivo del presente estudio realizado por Yuxuan Zhang y colaboradores de la Zhejiang University (China) fue analizar el impacto pronóstico del IMRa post ATC en pacientes portadores de un IAMSEST.
Se realizo con este propósito un estudio multicéntrico observacional retrospectivo que incluyó para el análisis pacientes portadores de un IAMCEST sometidos a revascularización mediante ATC, realizando la determinación del IMRa del vaso culpable del evento coronario a partir de la angiografía inmediatamente post ATC mediante un software dedicado para tal fin. Se identificó el mejor valor de corte de IMRa para pronosticar eventos clínicos adversos mediante un método de rango logarítmico, y analizo como objetivo primario al compuesto de muerte por causa cardiovascular (CV), rehospitalización por insuficiencia cardiaca, IAM y revascularización del vaso objetivo (MACE) a 2 años desde el procedimiento índice.
Se incluyeron para el análisis un total de 2.212 pacientes portadores de un IAMSEST. La edad promedio de la población muestral fue de 63 años, un 75% de sexo masculino y un promedio de IMRa post ATC de 20.63±4.17. Mediante el método estadístico implementado se categorizó a 206 pacientes como portadores de un elevado valor de IMRa. Así, los pacientes con un IMRa >25 presentaron una mayor ocurrencia de MACE en el seguimiento, en relación a aquellos con un IMRa ≤25, con una diferencia estadísticamente significativa entre ambos subgrupos (32.52% vs. 9.37%; p<0.001).
Se identificó a un IMR a post ATC >25 como un predictor independiente de MACE en el seguimiento (HR 4.230 [IC95% 3.151-5.679]; p<0.001). A su vez, al asociar este valor a los factores de riesgo cardiovascular convencionales se evidenció un incremento en el valor pronóstico (área bajo la curva ROC 0.774 vs. 0.716; p<0.001), con un índice de reclasificación neto de 0.317.
Conclusiones:
En pacientes portadores de un IAM sin elevación del segmento ST sometidos a revascularización mediante ATC, un incremento del índice de resistencia microcirculatoria derivado de la angiografía (IMRa) se asoció a una peor evolución clínica en el seguimiento. El IMRa presentó un elevado poder de reclasificación de riesgo, por lo que que debería considerarse en la práctica clínica.
Dr. Cristian M. Garmendia
Miembro del Comité Editor CACI
Título original: Prognostic Value of Coronary Angiography–Derived Index of Microcirculatory Resistance in Non–ST-Segment Elevation Myocardial Infarction Patients
Zhang Y, et al. J Am Coll Cardiol Intv 2024. Epublished DOI: 10.1016/j.jcin.2024.04.048