En el contexto clínico de un síndrome coronario agudo con elevación del segmento ST (SCACEST), el pre tratamiento farmacológico precoz con un inhibidor del receptor P2Y12 (iP2Y12) se ha convertido en una estrategia de abordaje terapéutico ampliamente utilizada a nivel global; sin embargo, cabe resaltar que existe escasa evidencia que avale su implementación, particularmente con la disponibilidad actual de los agentes antiplaquetarios potentes.

La administración precoz de un iP2Y12 previo al conocimiento de la anatomía coronaria mediante cinecoronariografía parece una estrategia válida contextualizando la elevada carga trombótica del SCACEST, el bajo riesgo de eventos clínicos asociados y diagnósticos alternativos donde la antiagregación pudiese ser deletérea (ej. disección aórtica aguda). En este contexto, la evidencia disponible hasta la fecha en términos de pre tratamiento antiagregante nos ha demostrado un incremento de eventos hemorrágicos mayores, sin una reducción de eventos clínicos isquémicos en el seguimiento.

El objetivo del presente estudio realizado por Miklos Rohla y colaboradores de la Universidad de Bern (Suiza) fue analizar las implicancias clínicas del pre tratamiento precoz con iP2Y12, en relación a su administración diferida.

Se realizó con este propósito un análisis de la cohorte de pacientes del Registro Bern, incluyendo pacientes consecutivos con SCACEST sometidos a revascularización mediante angioplastia transluminal coronaria (ATC) durante el periodo comprendido entre 2016 a 2020. Se estratificó a los pacientes incluidos de acuerdo al momento de inclusión al registro y las recomendaciones de las Guías de Manejo Clínico en relación a la administración del iP2Y12, considerándose como “cohorte 1” (2016-2018) a aquellos a los que se haya administrado el iP2Y12 inmediatamente, y como “cohorte 2” (2018-2020) a quienes el iP2Y12 haya sido administrado luego de la confirmación de la anatomía coronaria. Se analizó como objetivo primario al combinado de eventos cardíacos y cerebrovasculares mayores (MACCE, muerte por todas las causas, infarto de miocardio [IAM] recurrente, accidente cerebrovascular [ACV] y trombosis del stent [TIS]) a 30 días desde el procedimiento índice.

Se incluyeron para el análisis un total de 1.963 pacientes. La edad promedio de la población muestral fue de 65±13 años, con un 24% de sexo femenino. Del total de pacientes analizados, el promedio de fracción de eyección ventricular izquierda (FEVI) fue de 44±12%, y un 10% presentó shock cardiogénico al momento de la inclusión.

Se evidenció una ocurrencia de MACCE de 9.3% a 30 días desde el procedimiento índice. Así, no se observaron diferencias estadísticamente significativas en términos de MACCE entre ambas cohortes analizadas (10.1% vs. 8.1%. HR ajustado 0.91 [IC95% 0.65-1.28]; p=0.59). Tampoco se identificaron diferencias estadísticamente significativas en los objetivos individuales entre ambos subgrupos.

En términos de la estrategia de tratamiento antitrombótico prescrita, no se observaron diferencias estadísticamente significativas en términos de la ocurrencia de MACCE entre aquellos pacientes que recibieron pre-tratamiento con un iP2Y12, en relación a aquellos quienes no lo recibieron, respectivamente (7.1% vs. 8.4%. HR ajustado 1.17 [IC 95% 0.78-1.74]; p=0.45).

Conclusiones:

En pacientes con un infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST revascularizado mediante angioplastia transluminal coronaria, la administración del pre tratamiento antitrombótico con un inhibidor del receptor P2Y12 no se asoció a una reducción estadísticamente significativa de eventos adversos cardíacos y cerebrovasculares mayores.

Dr. Cristian M. Garmendia
Miembro del Comité Editor CACI

Título original: Pretreatment With P2Y12 Inhibitors in ST-Segment Elevation Myocardial Infarction: Insights From the Bern-PCI Registry
Rohla M, et al. J Am Coll Cardiol Intv. 2024;17(1):17–28.