La perforación coronaria constituye una de las complicaciones más graves durante la intervención coronaria percutánea (ICP) de una oclusión total crónica (OTC), ya que en muchos casos de no ser tratada a tiempo conduce al taponamiento cardíaco. La incidencia va del 4 al 12% aproximadamente, dependiendo de la experiencia de cada centro.

Se analizaron las características clínicas, angiográficas y del procedimiento de 9.618 pacientes sometidos a ICP de OTC de 38 centros de distintos países entre ellos Estados Unidos, Canadá, Turquía y Egipto. La incidencia de perforación coronaria fue del 3.8%. En cuanto al tratamiento, en el 28% de los casos se utilizó únicamente reversión de la anticoagulación y el 72% restante requirió una o más intervenciones para tratar la perforación.

Los pacientes que presentaron esta complicación eran mayores, tenían mayor prevalencia de hipertensión arterial, dislipemia, enfermedad arterial periférica y antecedentes de ICP o CABG previa. En cuanto a la anatomía de la OTC, aquellas que presentaron perforación eran más extensas y tenían características desfavorables como CAP proximal ambiguo o romo, mayor tortuosidad del vaso y calcificación moderada o severa. La puntuación J-CTO fue mayor en el grupo que presentó la complicación. El abordaje anterógrado fue la estrategia de cruce exitosa más frecuente en el grupo sin perforación, mientras que el abordaje retrógrado fue la estrategia de cruce exitosa más frecuente en el grupo que presentó perforación.

Al analizar estas variables se creó un score de predicción de perforación coronaria que incluyó 5 variables, a las cuales se les asignó un puntaje:

1) Edad igual o mayor a 65 años (1 punto)
2) Uso de acceso anterógrado por disección y re-entrada ADR (1 punto)
3) Uso del abordaje retrógrado (2 puntos)
4) Calcificación moderada/grave (1 punto)
5) CAP proximal ambiguo o romo (1 punto)

En el análisis el uso de técnicas avanzadas como ADR y abordaje retrógrado se asociaron de forma independiente con mayor riesgo de perforación. En el registro, el 41% de los pacientes tenía una puntuación PROGRESS-CTO de 2-3, lo que corresponde a un riesgo de perforación de 1,7% a 4,6%, y el 7,4% de los pacientes tenía una puntuación de 5, lo que corresponde a un riesgo de perforación de 11,2%.

Si bien los operadores expertos pueden alcanzar tasas de éxito técnico superiores al 85%, es fundamental minimizar las complicaciones, teniendo en cuenta que el principal objetivo de la PCI de la OTC es el alivio de los síntomas y subsecuentemente mejorar la calidad de vida.

Algunos pacientes, sobre todo los de edad avanzada, con características anatómicas desfavorables y síntomas leves parecerían beneficiarse del tratamiento médico inicial en lugar de ICP.

Conclusión:

Dada la facilidad de cálculo el score PROGRESS-CTO es una herramienta útil para cuantificar la relación riesgo/beneficio y guiar la toma de decisiones clínicas en pacientes con obstrucciones totales crónicas. Además podría ayudar a los operadores a guiar la planificación del procedimiento cuando realicen ICP de OTC con alto riesgo de perforación ya que la mejor estrategia para evitar esta complicación y sus consecuencias es una planificación adecuada de cada caso.

Dra. Giuliana A. Supicciatti
Miembro del Comité Editor CACI

Título original: Development and validation of a scoring system for predicting clinical coronary artery perforation during percutaneous coronary intervention of chronic total occlusions: the PROGRESS-CTO perforation score.
DOI: 10.4244/EIJ-D-22-00593