El accidente cerebrovascular (ACV) es la tercera causa de muerte y la primera de discapacidad en la Argentina. Representa la segunda causa de años de vida perdidos por muerte prematura.

El ACV puede ocurrir a cualquier edad, aproximadamente tres cuartos de los ACVs ocurren en mayores de 65 años y el riesgo se duplica en cada década a partir de los 55 años.

Uno de los principales determinantes de la ocurrencia del ACV es la presión arterial (explicando la mayor parte de su incidencia a nivel poblacional), seguidos en importancia por el tabaquismo, diabetes, ingesta de alcohol y perfil lipídico.

El ataque cerebral o accidente cerebrovascular isquémico constituye el 80-85% de los casos. Se originan como consecuencia de una alteración circulatoria en un territorio vascular a nivel encefálico, retiniano y/o medular, y que produce una lesión isquémica visible en las neuroimágenes.

Los síntomas que el paciente puede presentar según el territorio afectado son:

* Dificultad para hablar
* Debilidad en piernas o brazos
* Adormecimiento de algún sector del rostro
* Dolor de cabeza intenso y no habitual
* Dificultad para caminar
* Pérdida súbita de la visión de un ojo o de un campo visual
* Mareos
* Dificultad para coordinar movimientos

La consulta rápida ante la presencia de síntomas aumenta la posibilidad de evitar secuelas mayores. Si el paciente reúne ciertos criterios, algunas medidas terapéuticas se pueden implementar solo en las primeras horas de presentados los síntomas.

En el Día Mundial del ACV, queremos compartir más información sobre una enfermedad que provoca el 20% de los accidentes cerebrovasculares isquémicos que es la ateromatosis carotídea. Dicha enfermedad puede generar la trombosis (oclusión) de la arteria carótida o el desprendimiento de tejido ateromatoso/fibrinoplaquetario, con oclusión distal de un vaso cerebral (ateroembolia).

Puede provocar síntomas neurológicos (estenosis sintomática), o hallarse incidentalmente en un examen clínico (estenosis asintomática).

Los grandes estudios epidemiológicos han mostrado un riesgo de ACV isquémico-AIT de 12-13%/año en la estenosis carotídea sintomáticas, por tal motivo recomendamos la evaluación médica que determine cuándo es necesario tratar dichas obstrucciones.

Figure 1. Conceptual representation of ischemic stroke subtypes. Percentages are approximate and are informed by Kolominsky-Rabas et al36 and Gardener et al.3.

Bibliografía

* 2021 Guideline for the Prevention of Stroke in Patients With Stroke and Transient Ischemic Attack: A Guideline From the American Heart Association/American Stroke Association. 24 May 2021 Stroke. 2021;52:e364–e4

* Guía práctica en el manejo agudo del accidente cerebrovascular / Osvaldo Fustinoni … [et al.] ; editado por Gabriel Persi ; María Cristina Zurrú ; prólogo de Osvaldo Fustinoni (h) . – 1a ed. – Buenos Aires : Sociedad Argentina de Cardiología, 2021

* CONSENSO SOBRE ACCIDENTE CEREBROVASCULAR ISQUÉMICO AGUDO SANTIAGO G. PIGRETTI. MEDICINA (Buenos Aires) 2019; Vol. 79 (Supl. II): 1-46