La estrategia de abordaje terapéutico para la enfermedad coronaria aterosclerótica con compromiso del tronco de coronaria izquierda (TCI) no protegido continúa siendo motivo de controversia. En este contexto, las Guías de Manejo Clínico contemporáneas sugieren a la angioplastia transluminal coronaria (ATC) como una alternativa terapéutica válida para pacientes con compromiso de TCI de baja a intermedia complejidad anatómica.

Diversos estudios han demostrado que el compromiso a nivel ostial y en tercio medio del TCI presentan una mejor evolución, en relación a su compromiso distal. Hasta la fecha, no se ha reportado en forma individual la evolución de aquellos pacientes sometidos a ATC de estenosis ostiales del TCI.

El objetivo del presente estudio realizado por Yonggang Sui y colaboradores de Chinese Academy of Medical Sciences (China) fue analizar los factores pronósticos de eventos clínicos adversos y la evolución clínica a largo plazo de pacientes sometidos a una ATC con implante de stent liberador de fármacos (DES) a nivel ostial del TCI.

Se incluyeron pacientes sometidos a ATC de TCI no protegido, estratificando al total de la cohorte según la localización de la estenosis de TCI en ‘ostial’, ‘tercio medio’ o ‘distal’. Se analizó como objetivo primario al fallo del vaso culpable (‘target vessel failure’ [TVF], compuesto de mortalidad por causa cardiovascular [CV], infarto de miocardio [IAM] vinculado al vaso culpable y revascularización del vaso culpable). A su vez, se analizó mediante un modelo de regresión de Cox los factores independientes de eventos clínicos adversos en el seguimiento.

Se incluyeron para el análisis un total de 4.625 pacientes, dentro de los cuales 13.6% (n=627) presentaban una estenosis del ostium del TCI. Este subgrupo fue más añoso, con predominio de sexo femenino, menor índice de masa corporal y menor prevalencia de antecedentes de IAM previo, en relación a estenosis en otras localizaciones del TCI.

En términos de eventos clínicos adversos, no se observaron diferencias estadísticamente significativas en relación a la ocurrencia de TVF entre las distintas localizaciones de estenosis de TCI, a 3 años de seguimiento (‘ostial’ vs. ‘medio’ 7.5% vs. 6.8%; p=0.15. ‘distal’ 9.0%; p=0.88). Sin embargo, se observó una menor ocurrencia de IAM asociado a la ATC ostial del TCI, con una diferencia numérica en relación a estenosis del tercio medio (2.0% vs. 3.0%; p=0.95), y una diferencia estadísticamente significativa en relación a estenosis del tercio distal en bifurcación (2.0% vs. 4.2%; p=0.02).

En pacientes con ATC DES del ostium de TCI se identificaron a las complicaciones periprocedimiento como factores de riesgo independientes para la ocurrencia de TVF (HR 4.62 [IC 95% 1.34-15.8]; p=0.02). Por contraparte, la realización de la ATC más recientemente fue identificada como un factor protector (HR 0.91 [IC95% 0.83-0.99]; p=0.04).

Conclusiones:

Según los datos de este registro del ‘mundo real’, el 13.6% de las estenosis del TCI se encuentran a nivel ostial. Este subgrupo presenta una menor incidencia de eventos clínicos adversos, en relación a las estenosis con compromiso del tercio distal, particularmente en la ocurrencia de infartos asociados al TCI.

Dr. Cristian M. Garmendia
Miembro del Comité Editor CACI

Título original: Long-term clinical outcomes of percutaneous coronary intervention for ostial left main coronary artery disease
DOI: 10.4244/EIJ-D-22-00909