Introducción: los puentes miocárdicos (MB) son fibras musculares que rodean una arteria coronaria, afectando principalmente la parte media de la arteria descendente anterior izquierda (LAD). La prevalencia de un MB en la LAD tiene un rango desde 0.8% a 3.3% por angiografía coronaria, 22% a 23% por ultrasonido intravascular (IVUS), 30% a 36% por tomografía computarizada y 18% a 58% por autopsia. El implante de stents en estenosis proximales a un MB está asociado a peores resultados post-intervención coronaria percutánea (PCI).
El estudio actual tiene tres objetivos: confirmar que un MB es más prevalente en oclusiones totales crónicas (CTO) comparado con lesiones no-CTO, destacar que la discrepancia entre la estimación angiográfica y la longitud real de CTO evaluada por IVUS es mayor en CTO con MB que sin MB, lo que podría llevar a un uso de stents más largos y su extensión al MB, y finalmente, que la extensión del stent al MB distal al segmento CTO puede asociarse con peores resultados tras la PCI de CTO en la LAD.
Materiales y métodos:
Diseño: análisis retrospectivo y observacional realizado en dos centros, utilizando pacientes que se sometieron a una intervención coronaria percutánea (PCI) guiada por ultrasonido intravascular (IVUS) para oclusiones totales crónicas (CTO) y no-CTO en la arteria descendente. Los criterios de inclusión requerían imágenes IVUS de más de 40 mm de longitud distal al ostium de la descendente anterior para detectar un puente miocárdico (MB). Se excluyeron pacientes con restenosis intra-stent y post-trasplante de corazón.
Se definió como MB como una compresión sistólica con músculo ecogénico rodeando la arteria.
El punto final primario del estudio fue el fallo de la lesión objetivo (TLF) a los 2 años post-PCI, definido como una combinación de muerte cardíaca, infarto de miocardio del vaso objetivo o revascularización de la lesión objetivo impulsada clínicamente.
Resultados: entre enero de 2011 y diciembre de 2020, se identificaron 280 oclusiones totales crónicas (CTO) y 3.062 no-CTOs. La prevalencia de un MB detectado por IVUS fue mayor en CTOs de LAD (40.4% [113/280]) en comparación con no-CTOs de LAD (25.8% [789/3,062]; P < 0.0001). Entre pacientes con CTO en la LAD, no hubo diferencias clínicas significativas entre aquellos con y sin MB, aunque la longitud de CTO medida por IVUS fue significativamente menor en presencia de un MB. La expansión del stent post-PCI fue menor cuando el stent se extendió dentro del MB. Las complicaciones clínicas a 2 años mostraron una tasa de falla del tratamiento (TLF) significativamente más alta cuando el stent se extendió dentro del MB en comparación con los casos en que no se extendió o no había MB, principalmente impulsado por la revascularización del vaso objetivo.
Conclusiones:Aproximadamente el 40% de las lesiones CTO en la descendente anterior tienen un puente muscular detectado por IVUS. En aproximadamente la mitad de los PCI de CTO en la LAD, el stent se extendió dentro del puente muscular lo cual estuvo asociado con malos resultados a 2 años.
Dr. Juan Guido Chiabrando
Miembro del Comité Editor CACI
Título original: Presence and Relevance of Myocardial Bridge in LAD-PCI of CTO and Non-CTO Lesions
Yamamoto K, et al. JACC Cardiovasc Interv. 2024;17(4):491-501. doi:10.1016/j.jcin.2023.12.017