Introducción: la falta de adherencia a la terapia antiagregante plaquetaria se asocia con un mayor riesgo de eventos cardiovasculares. La disnea asociada al ticagrelor ocurre en casi el 20% de los pacientes que toman 90 mg de ticagrelor y resulta en la interrupción del tratamiento en hasta un tercio de los casos. El objetivo de este trabajo es identificar la incidencia, los predictores de dicha disnea, así como evaluar los resultados clínicos asociados con la monoterapia de ticagrelor en aquellos pacientes que interrumpieron el tratamiento debido a la disnea.

Materiales y métodos:

Diseño: subanálisis del estudio aleatorizado y controlado con placebo multicéntrico Twilight. Se incluyeron pacientes de alto riesgo de eventos isquémicos o hemorrágicos a los cuales se realizó angioplastia coronaria. Los riesgos isquémicos y hemorrágicos se definieron al tener al menos 1 criterio clínico y 1 criterio de alto riesgo procedural.

Los criterios de exclusión incluyeron infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST, shock cardiogénico, accidente cerebrovascular previo o necesidad de anticoagulación oral.

Los pacientes fueron tratados con aspirina y ticagrelor. Luego de los 3 meses fueron aleatorizados en forma doble ciega en una proporción 1:1 a aspirina o placebo durante 12 meses adicionales, en el contexto de la terapia abierta con ticagrelor.

Los puntos finales fueron eventos de sangrado de tipo 2, 3 o 5 según criterios BARC al año. El punto final secundario clave fue un evento combinado de muerte por cualquier causa, infarto de miocardio o accidente cerebrovascular.

Se utilizó un protocolo de interrupción de ticagrelor relacionado con disnea.

Resultados: de los 9.006 pacientes incluidos en el estudio, 544 (6.4%) interrumpieron ticagrelor en los primeros 3 meses después de la PCI, mientras 201 sujetos (2.8%) entre 3 y 15 meses después de la angioplastia.

Los pacientes con disnea tuvieron mayor edad, y mayores comorbilidades, con anatomías más complejas.

El tabaquismo activo, enfermedad coronaria previa, enfermedad vascular periférica, mayor obesidad y mayor edad (esta última el factor con mayor impacto) fueron predictores independientes de la interrupción del ticagrelor.

Independientemente de haber suspendido el ticagrelor, la monoterapia con ticagrelor se asoció con una tasa menor de sangrado de tipo 2, 3 o 5 del BARC en comparación con ticagrelor más aspirina (3.8% vs 12.1%, P = 0.044). La ocurrencia de muerte, infarto de miocardio o accidente cerebrovascular fue similar con la monoterapia con ticagrelor en comparación con ticagrelor más aspirina (5.0% vs 7.1%; P = 0.566). Finalmente, los eventos clínicos adversos netos (el compuesto de sangrado de tipo 2, 3 o 5 del BARC, muerte, infarto de miocardio o accidente cerebrovascular) fueron numéricamente menores con la monoterapia con ticagrelor (8.8% vs 17.2%; P = 0.100) entre los pacientes con interrupción del ticagrelor relacionada con la disnea.

Conclusiones:

La interrupción de ticagrelor relacionada con la disnea ocurrió en el 9.1% de los pacientes. Retirar la aspirina y continuar con la monoterapia de ticagrelor 3 meses después de la angioplastia parece ser una estrategia segura a pesar de este efecto secundario de la disnea relativamente común.

Dr. Juan Guido Chiabrando
Miembro del Comité Editor CACI

Título original: Dyspnea-Related Ticagrelor Discontinuation After Percutaneous Coronary Intervention
JACC Cardiovasc Interv. 2023;16(20):2514-2524. doi:10.1016/j.jcin.2023.08.019