El estudio RENOVATE-COMPLEX-PCI se trata de un ensayo prospectivo, abierto y multicéntrico, realizado en Corea del Sur que comparó la intervención coronaria percutánea (ICP) de lesiones complejas guiada por imágenes intravasculares versus guiada por angiografía sola, el cual demostró que la ICP guiada por imágenes intravasculares mejoró los resultados clínicos en comparación con la ICP guiada por angiografía sola. El objetivo de este estudio, realizado por Woochan Kwon y colaboradores, fue evaluar si el beneficio pronóstico de la optimización del procedimiento guiado por imágenes intravasculares persiste en pacientes sometidos a ICP por enfermedad de la tronco coronario izquierdo (TCI).
Se incluyeron 192 pacientes del ensayo RENOVATE-COMPLEX-PCI con compromiso del TCI. Los pacientes seleccionados fueron asignados aleatoriamente al grupo de ICP guiada por imágenes intravasculares o al grupo de ICP guiada por angiografía sola. Las imágenes intravasculares se podían utilizar en cualquier momento durante el procedimiento, pero eran obligatorias después de la implantación del stent para determinar si el segmento del stent estaba optimizado.
El criterio de valoración principal fue el fallo del vaso diana (TLF), definido como una combinación de muerte cardíaca, infarto de miocardio (IM) relacionado con el vaso diana o revascularización del vaso diana impulsada clínicamente (TLR).
Del total de pacientes, 138 fueron asignados al grupo ICP guiada por imágenes intravasculares y 54 al grupo ICP guiada por angiografía sola. Las características iniciales entre los dos grupos fueron similares. En general la mayoría de los pacientes eran varones (84,4%) y tenían una edad de 66,5 años. Las características angiográficas y la complejidad de la lesión estuvieron bien equilibradas entre los dos grupos. Aproximadamente la mitad de los pacientes tenían lesión distal en bifurcación. En el grupo ICP guiada por imágenes intravasculares, se utilizó ultrasonido intravascular (IVUS) en el 66,7% y tomografía por coherencia óptica (OCT) en el 4,7% de los casos.
En una mediana de seguimiento de 2,1 años (rango intercuartil de 1,1 a 3,0 años), la ICP guiada por imágenes se asoció con una menor incidencia del criterio de valoración primario en comparación con la ICP guiada por angiografía sola (6,8% frente a 25,1%; índice de riesgo, 0,31). IC del 95%, 0,13–0,76]; P = 0,010). Esta reducción significativa en el criterio de valoración principal se debió principalmente a un menor riesgo de muerte cardíaca o de infarto de miocardio espontáneo relacionado con el vaso diana (1,6% versus 12,7%; índice de riesgo, 0,16 [IC 95%, 0,03–0,82]; P = 0,028).
Luego del ajuste multivariable, la ICP guiada por imágenes intravasculares se asoció de forma independiente con un menor riesgo del criterio de valoración primario (cociente de riesgos instantáneos, 0,29 [IC 95%, 0,12–0,72]; P = 0,007).
Conclusiones:
La angioplastia de tronco coronario izquierdo guiada por imágenes intravasculares mostró un beneficio clínico sobre la angioplastia guiada por angiografía sola al reducir el riesgo de muerte cardíaca, infarto de miocardio o revascularización del vaso diana.
Dra. Giuliana A. Supicciatti
Miembro del Comité Editor CACI
Título original: Clinical Benefit of Intravascular Imaging Compared With Conventional Angiography in Left Main Coronary Artery Intervention
Circulation: Cardiovascular Interventions. 2023;0:e013359 – https://doi.org/10.1161/CIRCINTERVENTIONS.123.013359