La intervención coronaria percutánea primaria (ICPP) es el tratamiento estándar para pacientes con infarto de miocardio con elevación del segmento ST (STEMI). Sin embargo, aproximadamente la mitad de estos pacientes experimentan una perfusión miocárdica inadecuada, conocida como fenómeno de “no-reflow”, que aumenta la mortalidad. Estudios anteriores, como el TAPAS, sugirieron que la aspiración de trombos (TA) mejora la perfusión miocárdica y reduce eventos cardiovasculares, pero estudios posteriores (TASTE y TOTAL) no replicaron estos resultados. Actualmente, las guías no recomiendan la TA rutinaria en STEMI. Sin embargo, algunos operadores aún realizan TA en casos con gran carga trombótica (LCT). Este estudio, realizado por Ho Sung Jeon y colaboradores, investiga cómo la TA fallida afecta la perfusión y los resultados clínicos en pacientes con STEMI y LCT, además de evaluar predictores de fracaso de la TA.

Se trata de un subanálisis de datos del registro Gangwon PCI, un registro prospectivo, multicéntrico y observacional sin restricciones que incluyó a todos los pacientes que se sometieron a ICP en 4 hospitales de Corea del Sur. Para el análisis se incluyeron 812 pacientes con STEMI sometidos a ICP con LCT que recibieron TA.

La decisión de usar TA quedó a criterio del operador. Los catéteres de aspiración incluyeron el Thrombuster II (Kaneka Medical Products) y Export (Medtronic). El fallo de la TA se definió como cualquiera de los siguientes: 1) no recuperación del trombo; 2) trombo residual antes del stent (puntuación de trombo ≥2); y 3) embolización distal visible angiográficamente, definida como un defecto de llenado distal con corte abrupto en el vaso distal de la lesión culpable.

El resultado principal del estudio fue el grado de flujo TIMI final tras la ICP primaria. Los resultados secundarios incluyeron el grado de blush miocárdico final, la resolución del segmento ST en el electrocardiograma de 60 a 90 minutos después de la ICP primaria, la obstrucción microvascular, el tamaño del infarto en la resonancia magnética cardíaca (RMC), muerte por cualquier causa, muerte cardíaca, trombosis del stent y revascularización del vaso objetivo a 1 mes.

El 34.4% de los pacientes estaban en el grupo de TA fallida y el 65.6% en el de TA exitosa. Los pacientes en el grupo de TA fallida eran mayores que en el grupo de TA exitosa, pero ambos grupos estaban equilibrados en cuanto a factores de riesgo y características clínicas. Sin embargo, el grupo de TA fallida tuvo una mayor proporción de pacientes en clase Killip III o IV. El grupo de TA fallida tuvo un tiempo de procedimiento ICP más largo en comparación con el grupo de TA exitosa. Además, en el grupo de TA fallida, el 28.3% de los pacientes no lograron la extracción del trombo, el 45.5% tuvieron residuos de trombo y el 43.7% experimentaron embolización distal.

El grado de flujo TIMI fue de 0 a 2 en 71 pacientes (25.4%) del grupo de TA fallida y en 94 pacientes (17.6%) del grupo de TA exitosa (OR: 1.594; IC 95%: 1.124-2.261; P = 0.009). El grado de blush miocárdico fue de 0 o 1 en 55 pacientes (19.7%) en el grupo de TA fallida y en 73 pacientes (13.7%) en el grupo de TA exitosa (OR: 1.547; IC 95%: 1.053-2.273; P = 0.026). El grupo de TA fallida presentó una mayor incidencia de obstrucción microvascular y un tamaño de infarto más grande en la RMC con realce tardío de gadolinio en comparación con el grupo de TA exitosa. En cuanto a los resultados clínicos, las tasas de mortalidad por cualquier causa (11.8% frente a 7.1%; P = 0.024) y muerte cardiovascular (11.1% frente a 6.4%; P = 0.018) fueron más altas en el grupo de TA fallida en comparación con el grupo de TA exitosa. En el análisis logístico univariado, la edad, la clase Killip III o IV, una arteria distinta a la arteria Descendente Anterior como vaso culpable, la tortuosidad y la calcificación del vaso se asociaron con la falla de la TA.

 

CONCLUSIONES:

La tromboaspiración fallida en pacientes con STEMI y gran carga trombótica se asocia con una menor perfusión miocárdica. Factores como la edad avanzada, la inestabilidad hemodinámica, la tortuosidad del vaso, el grado de calcificación, y la presencia de una arteria culpable distinta de la ADA disminuyen la efectividad de esta técnica.

 

Dra. Giuliana A. Supicciatti
Miembro del Comité Editor CACI

 

TÍTULO ORIGINAL: Failed Thrombus Aspiration and Reduced Myocardial Perfusion in Patients With STEMI and Large Thrombus Burden.

CITA: Jeon et al. JACC Cardiovascular Interv. 2024 

REFERENCIA