Caso clínico

Leonardo Danduch, Marcos de la Vega, Claudio Gerbaudo, Juan Luciano, Lucas Gerbaudo

Revista Argentina de Cardioangiología Intervencionista 2024;(01): 0026-0029 | Doi: 10.30567/RACI/202401/0026-0029

Existe evidencia a favor del tratamiento percutáneo como técnica de elección en pacientes con aneurisma de aorta abdominal e indicación de tratamiento invasivo porque estos pacientes presentan menor estadía hospitalaria y menor mortalidad a corto plazo.

Luego de la intervención, la presencia (inmediata o tardía) de flujo periprotésico que continúa alimentando el saco aneurismático que se denomina endoleak, es una de las principales complicaciones a mediano y largo plazo, y se la ha reportado en un 20-50% de pacientes, siendo el tipo II el más frecuente (76% de los endoleaks). La mayoría resuleven de manera espontánea pero suelen intervenirse aquellos que evidencian crecimiento mayor a 5mm en 12 meses.

Se presenta el caso de un paciente que fue sometido a reparación endovascular de aneurisma de aorta abdominal con implante de endoprótesis aortobiilíaca. Durante el seguimiento presentó endoleak tipo II bilateral, originado a partir de ramos lumbares, con crecimiento de saco aneurismático por lo que se procedió a embolizar estos ramos con coils.

Comentario por el Dr. Mariano Revale